viernes, 31 de octubre de 2008

Elegía I

Ando pensando en las dunas de mi desierto,
ando escribiendo en los huarangos de mi pueblo...

escribo y susurro tu nombre..
mientras envuelvo en la arena, retazos del viento.
le canto a las aguas de esta laguna que estoy enamorado
y estremezco sus palmeras con mi cántico...

llorando al compás de una sinfonía muy triste,
acompañado por el vaivén sigiloso de las aguas esmeraldas
con el albor de tus recuerdos intactos en la mirada
me dispongo entero a llenarte de versos el alma...

y aunque no me escuches ni me leas,
aunque ambos sabemos que estamos lejos,
soy consciente de no haber saboreado
el calor de tu mirada ni la tierna dulzura de tus labios,
Aunque no encuentre abrigo en tus brazos mi poema...

este día esparzo una lágrima por el pasado,
por el presente y por el mañana...
aquel mañana que jamás viviremos...
ya que tu has partido al norte y yo me arraigo en el sur...
hoy en mis vagas líneas te digo adiós...
adiós amor..

jueves, 23 de octubre de 2008

No Puedo Decir Otra Cosa...

La inmensidad de mi agonía no tiene fin. Transcurren los días, el alma sufre lejos de ti. Te ofrezco lo poco que tengo. Un amor, unos versos y mis sueños... todo lo que puedo Soy un nómada en tierras extrañas. un pájaro, que ha perdido de sus alas el albor. sólo uno más, que te quiere conquistar... la diferencia radica en que sé lo que es amar... Te extraño, mi ser, mi espíritu entero te extraña No puedo de mi mente borrar tu melodiosa voz... Y hoy postrado por una enfermedad... Nuevamente reparo en la triste realidad. Hoy no puedo decir otra cosa. Que no sea el hecho que tu eres, la que debe ser... Aunque pienso que estas noches sin ti has de saberlo al igual que yo... Son mas duras y mas frías... Mas lánguidas y mas pueriles Y no puedo decir otra cosa, que no sea el hecho... Que tú eres la que debe ser... Siempre altiva, siempre bella,... Siempre dulce, siempre tierna... Siempre linda, siempre llena... De amor, candidez, lozanía y frescura... Hoy no puedo decir otra cosa... Que no sea... Que tú y yo... lo sabes muy bien. Nos complementamos.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Llevo Tiempo

Llevo tiempo sin saber... nada de ti
y me es difícil el pensar,
que de un momento a otro
me pediste terminar...

Llevo tiempo sin saber...
si, ¿haz llorado ayer o no?
tal vez se te han secado de un momento a otro
las lágrimas de amor.

Mas quizás el tiempo es vano
y no ha surtido efecto...
y aún te debes preguntar
en donde diablos, yo he de estar

Llevo tiempo sin saber...
si en todos estos días, algo a pasado...
entre tu y él, o entre tus memorias...
donde aún supongo he de estar.

Llevo tiempo, mucho tiempo...
escribiendo sin cesar, los dolores del ayer
y es que quiero olvidar...
aquellos tontos pasos que me enseñaste para amar

Llevo tiempo, en un mundo de crueldad
en donde todo parece normal,
encajando siempre en una triste realidad
en una triste, en una triste soledad.

Llevo tiempo, esperando reaccionar
a las palabras frías donde te escondiste
aquella noche oscura que me pediste lapidar
un amor tan puro, un amor sincero
un amor que nace cada cierto tiempo...
de un alma pura, para un alma única...

Intentado comprenderte, hoy te escribo mi elegía,
no te pido que regreses,
pues si has partido a buscar en otros brazos el amor,
es por que quizá lo mío, te resulto mera ilusión,
no te pido, ni te lloro; No te imploro...
ni ruego a que vuelvas, pues cansado ya me encuentro
de pedir y de llorar, de implorar y de rogar...
y si no los has hecho antes, pues ahora no lo harás

el caso es que llevo mucho tiempo
y aún no olvido, ni tus besos, ni el abrazo,
ni el calor de tu cuerpo junto al mío,
o el sabor inefable de tus labios,
no olvido mi reflejo en tus grandes ojos fijos
ni tus frases de cariño,
y aunque llevo mucho tiempo
y aún siento que te amo de verdad...
aunque rompa mi promesa,
no te pido regresar...
no te pido regresar...

lunes, 20 de octubre de 2008

Una Noche

Quisiera tenerte esta noche, sólo esta no para decirte nada, simplemente para mirarte... mirarte hasta que mis ojos emanen lágrimas de cansancio, mirarte hasta lograr que sientas en tu cuerpo el tacto de mi mirada... quisiera tenerte esta noche no para decirte nada, simplemente para mirarte... mirarte hasta que tus oídos escuchen las palabras de mi mirada y las elegías de mi alma...

Quisiera tenerte esta noche, bañada por la luna y abrigada por el manto oscuro del firmamento plagado de mis sueños materializados en estrellas, quisiera tenerte esta noche no para decirte nada, simplemente para mirarte... mirarte hasta que tu alma, converse con la mía a través de las miradas...

Quisiera tenerte esta noche, sólo esta... para poder decir que tu corazón una noche se llenó de mi pasión, y que compartió conmigo los sueños unísonos del universo, por que el universo nos llenó a la vez que yo os llené de mis sueños, mientras él de sus anhelos y su tradición.

Quisiera tenerte esta noche, de estrellas, de luna y de extrañas líneas para mirarte, tocarte, decirte y transmitirte una frase... 'te quiero' sin necesidad de mis manos, de mis ojos, de mis labios, sin necesidad de mi cuerpo, quiero tenerte esta noche, para demostrarte la esencia de las miradas, plasmadas en el viento.

domingo, 19 de octubre de 2008

versos en ruidos I

Como quisiese poder, en tres líneas solamente... describir la pasión, una pasión sin rencor, arrebatos o dolor, una pasión sin llanto ni alegría...una pasión parsimoniosa la esencia misma de todas, como quisiera en tres líneas solamente describir... “el amor” Y el silencio de tu cuerpo, induce a mis sentidos hacia la comunión de la carne, es entonces cuando mis ojos son capaces de palpar y mis manos intrínsecamente obtienen la destreza de observar, es cuando estás tu, que todo evoluciona a su punto máximo de perfección... Sentir el viento en cada poro del cuerpo, el calor del agua, la suavidad del fuego que abrasa, escuchar el silencio y percibir quedo, muy quedo los ruidos del tiempo... sentir los rayos de la luna atravesar los ojos... y encontrarse cara a cara con el alma.

sábado, 18 de octubre de 2008

Dedos entumecidos

Tiempo va desde que no escribo,
Y es que cosas raras pasan por mi mente cuando me encuentro solo,
A veces el miedo, a veces la gloria…
A veces la dicha y a veces la pena ilusoria;

Tengo momentos de locura,
En las que embarga mi ser la alegría de un infante,
Y están esas veces de nostalgia infinita,
Transcurridos seis segundos tras un abrazo,
Y llega la melancolía cuando no siento tus labios.

Llega todo y sigo esperando...
Y te traigo a mi mente, para resucitar los sabores del mañana.
Y te traigo para no desfallecer, cuando pierdo la batalla.
Y te traigo para mi calma, cuando el alma abatida sangra los anhelos.

Lo que siempre dije... lo que siempre repito,
En silencio más que a mi mismo, amo tu sonrisa e idolatro tu recuerdo,
Amo el perfume que se adueña del ambiente,
Cuando sueltas tus cabellos a cabalgar con sigilo sobre el viento.

Me deleito,
Cuando me abrazas frente a todos
Y me entristezco cuando te distancias,
Cambio mis ánimos, cual mercurio expuesto a la temperatura,
Según tu trato...
Cuando no te importa que nos vean y encolerizo cuando te distancias,
Cuando brillan tus sonrisas y arisco cuando te distancias,

Pero encadenas mi voluntad a la tuya,
Cuando me dejas acompañarte y cuando eres una niña enamorada,
Cuando besas, cuando hablas y cuando callas...
Tu ser entero, palmo a palmo, poro a poro, me cautiva y encarcela

Quiero darte por entendido, es lo que quiero que vivas,
Y es que aún tengo esperanzas en que no debo deciros las cosas que quiero,
Quiero la que adora al que asiste, la que besa y la que llora,
Quiero la que quiere por que siente que la quieren,
Y que ama por que siente que la aman...

Quiero la que no tiene, no siembra y no teme a las dudas.

Recuerdos del Ayer

El Viento nocturno me roza la faz...
Y las nubes del alma... claman ¡piedad!

Hoy te he vuelto a ver...
Un extraño cosquilleo,
Recuerdos del ayer...

Esta noche, absorta ante tu presencia,
Es testigo de tu dura indiferencia.

Es la luna, aliada de mis versos.
Eres tú, en donde sucumben mis ideas.
Son tus labios... presencia del pecado.
Y tus manos el espejo de mi llanto.
Son tus ojos, abismales paraísos...
Testigos de mi hondo sentimiento.

Eres como tu nombre,
Hermosa, lozana, una flor...
Símbolo de amor, de pureza y de pasión.

Hemos cruzado por instantes las miradas.
He sentido el hielo, hecho mujer.

Una lágrima nace en el alma
¡Un corazón es el que te habla!

Hoy te he vuelto a ver...
Un extraño cosquilleo,
Recuerdos del ayer...